El mundo es hoy un lugar un poco más gris. La blogosfera es ahora un mundo un poco más triste. La abuela bloguera, como se la conocía, ha fallecido. María Amelia, autora del blog A mis 95 descansa en paz junto al mar. Esto me ha entristecido profundamente. Mucho más de lo que cabría esperar. Solía leer su blog, aunque nunca le dejé un comentario. Me gustaba su calidez y sinceridad, su vitalidad y experiencia. En una sociedad donde solemos arrojar a nuestros mayores en una esquina para olvidarlos, ella nos recordaba que hubo tiempos donde ser mayor no era una carga ni un engorro. Nos recordaba que nuestros mayores están ahí, en todas partes y que si te sientas a su lado a escuchar puedes descubrir historias increíbles y personas maravillosas.
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